lunes, 7 de enero de 2013

Imaginación

Por el día veo imágenes
gracias a mis ojos,
sé qué hay de comer
gracias a mi olfato,
sé el sabor que tiene algo
gracias a mi gusta,
sé qué pájaro canta
por mi óido
y gracias a mi tacto
sé como es tu piel.
Pero...¿cómo percibo mi mundo?
Os lo diré:
cierro los ojos
y los mantengo cerrados,
en mi mente no hay nada,
está vacía,
solo hay negrura,
no hay nada,
no hay movimiento,
entonces...
empieza a aparecer una luz en
toda esa oscuridad,
esa luz
ilumina una ciudad en la oscuridad,
en ella hay personas,
y van despertando,
poco a poco,
de su gran letargo,
sus vidas son tranquilas y apaciguantes,
a veces corren aventuras,
a veces viven una vida gozosa y en paz,
a veces viven mal y penosamente,
a veces las almas condenadas se vuelven buenas
y pueden encontrar la luz a este mundo,
los animales viven con los humanos,
las personas son benévolas y solidarias,
los humanos no contaminamos el planeta,
vivimos sin la tecnología
que nos hace tan avariciosos a todos,
vivimos sin lujos
por lo que convivimos sin tapujos,
y tras todo esto
se encuentra en un jardín
lleno de enormes árboles
jubilosos y llenos de vida
en los cuales en sus ramas
hay un gran gato
fumando de una enorme pipa,
y a su lado
tumbado en una gran hamaca
estoy yo,
repantingado,
fumándome la vida de mi gran sueño,
y tengo a mi gran amor a mi lado,
entonces,
tras todo este mundo de felicidad,
abro los ojos
y despierto en esta amarga realidad.
observo resignado que todo eso no será posible nunca,
que nunca cambiaremos,
que nunca seremos mejores de lo que somos,
y nunca nos superaremos,
por eso,
cada día mi mundo se hace más grande,
tanto que ya me desborda,
y,
lo más importante,
cada vez que vuelvo,
y, 
luego,
regreso,
siempre vuelvo con una sonrisa
en mi corazón.




PD: ¿Te vienes a fumarte una vida? Es gratis.
PD2: Crea tu propio mundo.
PD3: No dejes que te lo quiten.

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